EXPERIENCIAS EN EL LECHO DE MUERTE
INFORMACIÓN PROCENDENTE DEL LIBRO LA PRUEBA DEL ALMA
EXPERIENCIAS RELACIONADAS DIRECTAMENTE CON LA PROPIA MUERTE
Las Experiencias en el Lecho de Muerte (ELM en adelante) constituyen una importante oportunidad de reflejar la continuidad de la Conciencia tras la muerte física.
El fenómeno ELM es experimentado por personas que están en proceso de su propia muerte. Suele consistir en percepciones y visiones, con frecuencia parecidas a las ECM, y es testimoniado por personas que están acompañando a la persona en este proceso, fundamentalmente hijos, familiares o personal sanitario.
Las personas acompañantes informan de que el enfermo que experimenta ELM refiere la visita de familiares fallecidos tales como padres, abuelos, hermanos o figuras religiosas que vienen para acompañarlos en el tránsito. Los niños, que no conocen familiares fallecidos, relatan la visión de personajes reales o mágicos queridos para ellos, que están con ellos durante el trance de morir. Generalmente la experiencia resulta reconfortante y proporciona paz y confianza. Así mismo, los acompañantes no solo escuchan el relato de la experiencia ELM si no que, en ocasiones, también visualizan directamente lo que experimenta la persona en trance de morir.
En el trabajo recopilado por Nacho Blasco, en su libro La Prueba del Alma, se han recogido 17 investigadores que han estudiado desde distintos enfoques el fenómeno ELM, entre sus trabajos científicos:
Destaca el trabajo de Kerr y su equipo quienes entre 2011 y 2012 entrevistaron a 66 pacientes en proceso de morir, explorando la frecuencia de visiones, su contenido y su relación con la calidad de la muerte. El estudio concluye que las experiencias ELM durante el trance de morir son comunes y se caracterizan por un fuerte sentido de realismo y un profundo significado emocional, teniendo un importante significado y sentimiento de confort para las personas que están en este proceso.
Por su parte Carla Wills-Brandon [17] investigó en profundidad las visiones en el lecho de muerte, recopilando experiencias de cerca de 2 mil casos de diferentes culturas, zonas geográficas y condición personal y social. Encontró que estas experiencias reflejan la continuidad de la Conciencia, y que ésta empieza a presentarse en el proceso de muerte antes de la desconexión física.
El equipo de investigación del Instituto Blasco ha recopilado experiencias ELM. La mayoría son de personas mayores en contexto hospitalario presenciadas por la Doctora Cardoso.
Destacamos la vivencia ELM de una mujer de 75 años que fue contando en directo cómo se iba desprendiendo minuciosamente de su envoltura física durante su proceso de tránsito hacia la otra vida, especificando que estaba relatando su nacimiento a la dimensión que la esperaba. Algunas de las experiencias fueron presenciadas por las personas acompañantes, como el caso de la hija que vio a su madre y ella misma envueltas en un cono de luz y de repique de campanas al momento de su fallecimiento; o el hombre que vio un cordón energético de luz brillante que salía de la zona umbilical del cuerpo de su abuela en trance de morir, cuyo haz envolvió toda la habitación de luz y paz.
Desde nuestra experiencia, el 99% de las personas a las que hemos acompañado en el lecho de muerte experimentan presencia de sus seres queridos que vienen a buscarlos, así como, presencia de luz, e inmensa paz.
Todas estas experiencias, junto a las múltiples relatadas en libros de profesionales que trabajan en unidades de cuidados paliativos, o desde asociaciones que dan apoyo a personas con enfermedades como el cáncer, así como las investigaciones referidas más arriba, apuntan a que en el proceso de morir empiezan a manifestarse tanto de forma subjetiva y, en ocasiones, testimoniado por personas acompañantes, aspectos importantes de la existencia tras el morir. Este fenómeno, cuando se muestra en el proceso del trance de muerte de las personas, no está determinado por la edad, la cultura, la religión, ni el país.
Sin lugar a duda, tenemos el privilegio hoy en día de poder estudiar estos dos fenómenos: experiencias cercanas a la muerte (ECM) y visiones en el lecho de muerte (ELM), que son una asombrosa “ventana” a diversos aspectos de la continuidad de la existencia tras la desconexión del cuerpo físico.
Este fenómeno que acabamos de revisar no es el único que manifiestan nuestra realidad no material y eterna.
«Nacho Blasco»